Carlos Keen


Mi paso por Carlos Keen

Cuando pienso en Carlos Keen pienso en amigos. Será porque los lugares siempre tienen la impronta de las personas, y en este caso de las personas con las que lo compartimos. Recorrer un pueblo con amigos tiene un encanto especial, porque además de caminarlos los disfrutas, los compartís.

Salimos temprano a la mañana porque en invierno los días son cortos y la única forma de poder disfrutarlos es madrugar. Son unos 90 Km desde la Ciudad de Buenos Aires. Me  gusta parar cuantas veces sea necesario, la idea es que la ruta sea parte del viaje y no sólo llegar a destino (nunca se saben las sorpresas que te esperan, que son parte de la magia de andar).

Cosas obligatorias en nuestros viajes:

  • GPS (y haber mirado más o menos donde queda y por donde ir en un mapa, aunque siempre un poquito nos terminamos perdiendo);
  • agua;
  • equipo de mate;
  • lona (grande para sentarnos todos);
  • tabla, tenedor y cuchillo (siempre, pero SIEMPRE llevalos porque cuando pasas por los puestos de quesos, salames, etc. es muy difícil resistirse y maldecís el momento en que no los cargaste);
  • cosas para picar (dulces y saladas porque a veces la ruta se congestiona y tener comida es fundamental para no entrar en crisis!!!),
  • música (porque en los caminos las radios van y vienen y la música rutera que seleccionaste para ese viaje cuando la vuelvas a escuchar te va a remontar a ese momento inmediatamente);
  • ahhh, y rollo de cocina, ¡ese te salva en todas!

Kenn

Que hay para hacer

El centro urbano está concentrado en un predio rectangular que está alrededor de la estación del FFCC. Allí está el antiguo galpón de acopio de cereales que fue convertido en un centro cultural, con exposiciones y presentaciones de espectáculos a la gorra para toda la familia.

A su alrededor se ubica, además de la Iglesia de San Carlos Borromeo de principio del siglo pasado, la panadería, dos escuelas (una primaria y otra de enseñanza media técnica), la biblioteca, y por supuesto las viviendas y sus pobladores.

esquina

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Cada fin de semana hay distintas actividades que se realizan en y frente al Centro Cultural y Turístico “El Granero”. Podés consultar las actividades en la fanpage de Facebook  (El Granero de Carlos Keen)  y planificar tu paseo para que te diviertas solo, con amigos o en familia.

A nosotros nos tocó ver a “Tertulio el payaso” con su espectáculo de clown.

tertulioPayaso

Para comer podés comprar comida tradicional en la feria local y disfrutarla en el gran espacio verde que tiene para que hagas picnic. Otra buena opción es recorrer las calles aledañas, en donde encontrarás muchos restaurantes con carta de plato único (generalmente parrilla). Tené en cuenta dos cosas: los precios no son económicos y demoran mucho por la gran demanda de gente que va, así que si decidís sentarte (y vale la pena porque la comida es riquísima) armarte de paciencia y no lo dejes para el último minuto. También tenés la opción de un pequeño bar en una de las esquinas, que te sirve empanadas, sandwich, cremonas, pan casero y hasta los pastelitos para el mate de la tarde.

Algo que recomiendo es perderte por las calles, hay muchas y muy lindas que te permiten desconectarte y alejarte un poco de la concentración de gente. Podes caminar por las vías del tren o descubrir casas abandonadas que te invitan a imaginar historias.

entradacasa      caminando      relax      CasaRincon      perrito

Y para cerrar un día maravilloso no hay nada mejor que ver el atardecer en la ruta.

RutaCarlosKeen

Un poco de historia

Carlos Keen es un pueblo a 15 km de Luján en dirección a San Andrés de Giles. Se fundó oficialmente en 1881 cuando se inauguró la estación de ferrocarriles del ramal Luján – Pergamino.

En sus orígenes se caracterizó por ser un centro de acopio y despacho de la producción de la zona (predominantemente había emprendimientos agrícolas y ganaderos). Por esa época tenía alrededor de 3 mil habitantes y una gran expansión del pueblo: dos escuelas primarias, tres clubes, Registro Civil, comisaría, hoteles, pensiones, restaurantes, almacenes de ramos generales, zapaterías, ferreterías, farmacias, casas especializadas en instrumentos agrícolas y ganaderas, corralones, surtidores de nafta, etc.

Hoy sólo tiene 557 habitantes, unas 400 familias, contando los ámbitos rural y urbano (INDEC, 2010). La gran deserción fue hace unos 30 años cuando el ferrocarril dejó de funcionar, al igual que ha sucedido con tantos pueblos de nuestro país.

En el año 2007, Carlos Keen fue declarado “Poblado Histórico” por la Comisión Nacional de Monumentos y Sitios Histórico para preservar la zona de la localidad.

Cómo llegar

Desde la Ciudad Autónoma de Buenos Aires: Se encuentra ubicado a 83 km. Se puede llegar por el Acceso Oeste y luego RN N°7 hasta el km. 72, donde se debe tomar el camino conocido como “Acceso a Carlos Keen”, por el cual hay que transitar 10 km. Este camino ha sido recientemente remodelado.